No tengo porque molestarme, ya lo presentía, y es que definir esa relación, amistad o no se que era muy difícil, algunas veces éramos «amigos con derecho a roce», otras veces «amigos cariñosos», otras «amigos conchudos» y en la mayoría de casos ella me recordaba que lo nuestro solo es de “amiguchos”, pero que rara amistad, atípica, informal, irracional, infantil, inmadura, desbalanceada, etc.