Parafília y Control – Parte 3

Siempre salía a discotecas con mi amiga Mireya, me gustaba porque es súper divertida, incansable, una gran bailarina, de pelo castaño largo y ondulado, con tacos llegaba a mi estatura, siempre se vestía guapa, muy preocupada de su nutrición, salud y peso, por eso todo le quedaba bien, mi mejor amiga de ese momento, y sucedió que en una oportunidad en la discoteca ‘Tekendama’ que siempre frecuentábamos, ella se puso a bailar sola, yo ya acostumbrado a esas situaciones que la verdad no me molestaban para nada, me puse a observarla como si fuera mi doncella de mi harem de chicas y que esta bailando solo para mi (ya lo había hecho antes decenas de veces), pero de ahí se fue al baño y no la vi un par de canciones. Me senté solo en la zona de mesas esperándola, pero de pronto la vi bailar con un desconocido, bueno supuse yo la estaba aburriendo y normal, total yo también podía hacer lo mismo, y lo hice!, al empezar una nueva canción salí en busca de una chica y me encontré con un par de chicas solas en una mesa, las invite a bailar y salieron las 2, nos pusimos a bailar en trio como 2 canciones y volvimos a la mesa, pero al volver estaba Mireya con una cara de pocos amigos que solo la ignore. Junte otra mesa y nos pusimos a conversar todos juntos, bueno en realidad eramos 2 grupos claramente identificables, Mireya con su nuevo amigo, y yo con estas nuevas amigas que conocí, una se llamaba Fabiana y la otra Katia, se notaba eran muy amigas pues conversaban mucho. Como note cierta indiferencia y molestia en Mireya me apegue más a mis nuevas amigas y la ignore totalmente a Mireya, sobretodo me apegue a Fabiana que era la más interesante, era más alta que Mireya, tenía el pelo negro parecido al de Mireya, pero de piel color miel, me llamaba la atención por su forma de bailar desinhibida, sensual y al compás conmigo, así que nos pusimos a bailar juntos unas 3 canciones más, de ahí volvimos a la mesa y así varias veces, pero de pronto Mireya se levantó de su mesa toda molesta, yo ni cuenta me daba hasta ese momento donde estaba pues la ignoraba totalmente, cuando le tome atención me di cuenta que su nuevo amigo ya no estaba y ella estaba solita en otra mesa del costado, incluso me hacia señas de que ya se quería ir, yo como todo caballero le dije que ok nos vamos juntos pues debía acompañarla hasta su casa, pero le dije que me espere que me despida, y así me despedí de Fabiana y Katia, a ambas les deje mi tarjeta personal.

Ya en el camino dentro del Taxi a Mireya le dio por ponerse muy celosa, me reprochaba que haya conocido a esas chicas, me decía: “como les das tu tarjeta a esas putas”, siempre muy expresiva ella, para ella todo el mundo le apesta, son cholones o vulgares como ella, yo le dije que ella fue la primera en salir a bailar con otro y por eso hice lo mismo, pero Mireya no entendía razones, era una celosa reprimida. Le agarraba las manos tan bonitas que tiene a modo de pedir perdón, ella me rechazaba pero en cierta forma le gustaba haga eso, le comencé a agarrar su pelo pasando mi mano por su cuello, de paso le hacía unos masajes que se que le gustaban, de pronto ella más calmada me daba palmadas en la pierna, esa es la señal de que puedo ir mas allá, y como no soy de roca me controlo pero con ella algo me pasa que me excita un montón, tal vez las 2 botellas previas de vino Carmenere estén ayudando a este crecimiento geométrico en mi herramienta masculina, y ella lo noto al instante, de pronto me da palmadas en esa zona a modo de confirmar lo que ya se notaba a distancia, así que olvidándose de los celos me dijo a la oreja: “bajemos por aquí cerca para jugar más tranquilos”, ok le dije y le avise al taxista que pare donde sea, pero que se detenga ya!, creo lo dije con un tono de voz como si se hubiera pasado del sitio donde debíamos bajar, pues freno intempestivamente, le pague y al instante Mireya me jala de las manos y me lleva hacia un pasaje cercano, estaba oscuro y como eran las 3:45 am había un silencio sepulcral, ahí nos acomodamos en una pared pegada a un poste de luz donde nos comenzamos a besar desenfrenadamente, perdimos todo respeto de amigos, nos tocábamos como una pareja que hacia el amor en el aire, ella se subía a mí, se abría de piernas, le encantaba que simule que la penetre, me abrazaba duro para no caerse, y yo no se de donde sacaba fuerzas ya que creía yo nunca duraría tanto cargando sus 58 Kgs., así estuvimos por unos 10 mins, hasta que yo ya no podía aguantar más, necesitaba que esto pase al plano carnal como debería ser para la situación ‘erecta’ en que estaba, después de tanto tiempo no creí una chica me vuelva a excitar tanto, y me sentía listo para soltar toda esa energía retenida por meses, le dije a la oreja: “vamos a un hotel”, y en ese momento ella no quiso seguir y me jalo al paradero para ya irnos a nuestras casas, yo me sentí sorprendido, frustrado, molesto internamente muy molesto!, pero hasta en esas situaciones tengo control, despues de 2 o 3 mins de la «caida de la bolsa» ya todo seguia como era antes, solo un par de amigos, ni más ni menos, “bye”, “nos vemos otros día”, “estuvo xevere”, “duerme bien”, las palabras finales de siempre al dejarla en su casa.

Pasaron los días y me llamo Fabiana, quedamos en encontrarnos para salir a cenar, normal acepte y así fue como salimos como 2 o 3 veces mas, hasta que vino la cita cumbre donde luego de bailar y tomar unos tragos en la Discoteca ‘Misky Wasi’ nos fuimos a un Hostal, le pedí al recepcionista la mejor habitación, me dijo: “la mejor es la que tiene Jacuzzi y Cama Redonda”, esa acepte al toque, y si la habitación tenía un enorme Jacuzzi que ya me imaginaba me daría mucha motivación para llegar a la satisfacción, nos pusimos a besarnos en la cama, nos manoseábamos, hasta estar totalmente desnudos, para luego pasar a probar el Jacuzzi el cual nunca antes había probado, y me encanto un montón, el agua calientita y burbujeante, la espuma abundante, los pétalos de flores, los perfumes, todo iba de maravilla, luego regresamos al ring de combate, una cama redonda toda de color rojo e hicimos el amor un par de veces, la verdad no me gusto, tuve que fingir o exagerar que llegue al éxtasis, no pude nunca terminar, y no es que me haya cansado, sino que no pude eyacular nada de nada, era como si tuviera un bloqueo automático que evita pasar al límite, y si sentía placer al hacer el amor con ella, pero no llegaba al tope, ese era el problema. Habremos salido unas 3 veces más y en una incluso rente la suite presidencial del Hotel Prince en San Borja, pero nada de nada, entonces supuse que yo tenía un problema mental que ya me estaba bloqueando la puerta al placer total. Con Fabiana solo estuvimos unos 3 a 4 meses de pareja, luego se enfrió por cuestiones mías y solo quedamos como amigos.

Estos 2 mini relatos son un par de ejemplos de lo que me estuvo pasando estos últimos años, una mezcla de frustación, conformismo sexual y desilusión, ya que el sexo es de a 2, es decir ambos deben gustarse para llegar al éxtasis, de repente con Mireya si hubiera explotado como debería ser, pero con Fabiana no era lo mismo, y eso que siempre ejecutaba mi ritual previo tipo la serie rosa para llevar una sesión excitante y prolongada, bueno ese es mi metodo que he aprendido leyendo, observando y ya luego experimentando, pero ya no bastaba.

Conclusión

El sexo no es importante en una relación, he dicho!, si se deben estar riendo algunos después de haber leído las 2 primeras partes de este tema y esta ultima, otros creerán que ya me volví loco, otros que soy un pasado de moda, bah!, lo tengo bien claro pues no lo digo por simple argumento, yo he tenido y conocido todo sobre el sexo así que puedo fundamentar lo que digo. Y digo que una relación de pareja (no de intercambio de sexo que es otra cosa) es comprensión, amistad, admiración, diversión, y en último lugar está el sexo, y aun así no es importante, pero hagamos una separación, una cosa es ser pareja para vacilarse, otra para convivir y otra para casarse, y por lo visto solo me he estado vacilando estos años con algunas amigas, y viceversa también.

Estoy 100% seguro que se debe convivir un tiempo previo antes de casarse/amarrarse, ya que en una pareja no será por amor por lo que se lleguen a separar, sino más bien será por los defectos y las incomprensiones que lleguen a descubrirse en ese tiempo de convivencia. Y una de esas cuestiones por las que se llegue a terminar la relación puede ser el sexo si solo para eso se han unido, en el conjunto de cualidades sopesa otros asuntos que son más importantes o trascendentales.

Estos ideales los vengo acumulando de palabras y actos desde el año 1998, año en el cual empezó toda esta historia por el mundo del sexo y el placer. Digamos que ya para esta época tengo claro lo que busco, pero recién en el 2008 es que reconocí gracias a las relaciones y amistades que he pasado, que todo se define en CONTROL, la 2da palabra de este tema, y es que pase de ser un “Parafílico Sexual” a un experto en “Control del Deseo y el Placer”, en todo sentido, comprendí acumulando experiencia que el sexo no es la única manera de sentirse bien, pero a su vez llegue a comprender que es divertido galantear con alguna chica haciéndole creer que solo la veo como un objeto sexual, digamos que llegue a manipular los sentimientos y hasta a veces usarlo como un arma de prueba.

Les he llegado a contar en estos 3 capítulos como fueron mis pininos en el sexo, como fui experimentando hasta conocer variantes, opciones, llegue luego a hastiarme del sexo que ya casi nada me excitaba, o a veces pasaba que necesitaba altas dosis de motivación para llegar al éxtasis.

Como dice la canción que escogí para finalizar este tema: “Si el lenguaje es otra piel, toquémonos más, con mensajes de deseo”, define muy bien la conclusión a la que he llegado, de que llevar una buena comunicación con la pareja puede ser suficiente para llevarse bien entre los dos, y si sigue así porque no continuar o mantenerlo así dejando de lado el sexo.