Que somos los Peruanos?

Perú
Perú

«Yo no soy Peruano!», si podría sonar antipatriota, desleal, digno de llevarme a la Inquisición y quemarme vivo, o sino acusarme de traición a la patria, pero a lo que me refiero y a lo que tratare a continuación es a lo que somos, a nuestra actitud, buenas cosas y a su vez pésimos modales que tenemos los peruanos.

Somos una cultura rica en pasado, con muchos avances notables en estos años, valoramos mucho nuestro pasado, aunque a veces exageramos y vivimos del mismo recordando proezas antiguas que ya son eso: Antiguas.

Tenemos la geografía más hermosa que pudiéramos tener, hermosos lugares para visitar, ya conocí Machu-Picchu y no saben lo hermoso que es, pero eso es solo una muestra de todo lo que tenemos.

Silla de Oro
Silla de Oro

Es muy cierta la frase: «El Peruano está sentado en una silla de oro», la cual resume mucho de cómo somos, no valoramos lo que tenemos y no hacemos nada por aprovecharlo, somos bastante creativos, con muy poco hacemos maravillas, hemos soportado crisis espantosas, hemos salido de guerras internas con el terrorismo, podemos vivir con muy poco, pero … y aquí va lo malo de nosotros, ya que cuando tenemos en demasía no sabemos que hacer con eso, y cuando se nos presenta una oportunidad para crecer o cambiar no lo hacemos, nos hacemos un mundo con las oportunidades, es en cierta forma el nivel de conformismo que existe, queremos la vida fácil y el camino más corto para algo, facilismo, criollada, viveza, apuro, desorden, ignorancia, hipocresía, racismo, esas son algunas de las palabras que nos definen de mala forma.

A.A.Caceres
A.A.Caceres

Somos reprochadores y cambiamos rápidamente de opinión, fácilmente nos influyen los medios de prensa, en la historia hemos tenido personajes que cambiaron nuestro País, ya sea Peruanos o Extranjeros que nos ayudaron, y luego los desacreditamos hasta tacharlo y no valorarle por lo bueno, solo buscamos lo malo de el haciendo que sus grandes logros queden borrados, casos son muchos, por ejemplo citare lo de San Martin y Bolívar, los cuales libertaron nuestro País pero luego los botamos como perros, ya sea por un grupo de intelectuales o criollos de esa época que querían gobernar a su manera o porque ya desde esa época definíamos nuestra actitud reprochadora. Otro caso interesante es el de Andrés Avelino Cáceres, el cual fue uno de los Generales que si logro triunfos en la Guerra con Chile, pero sin embargo mas se valora a los que murieron por diferentes causas también valorables pero por derrotas al fin y al cabo, en cambio Cáceres tuvo en zozobra en todo momento al ejército chileno, contando con muy pocos recursos, con soldados que solo sabían sembrar y cosechar en sus tierras, luego Cáceres llego a ser Presidente del Perú y la historia dice que fue tachado de todo logro y hasta encarcelado y

Claudio Pizarro
Claudio Pizarro

juzgado por corrupto, como casi siempre terminan los presidentes en el Perú. Y para acortar tiempos, un ejemplo más es el de Claudio Pizarro, uno de los futbolistas más destacados del Perú que ojala la historia lo juzgue como debe ser, acusado de juerguero, luego resarcido, tachado de petulante y creído, pero sin embargo con un éxito notable en Alemania.

Y ahí hay algo interesante, pues es como si los Peruanos tendríamos que salir fuera de nuestro País para conseguir éxito y ser valorados, o será que en nuestra sociedad no se puede tener éxito?, o será que en otro País nos valorizan y aprovechan mejor, pero he llegado a una teoría, y es que como equipo de trabajo, como grupo organizativo entre peruanos dentro del Perú somos malos, malísimos, nos odiamos, nos tenemos envidia, buscamos cualquier cosa para catalogarnos, tacharnos entre nosotros, a la mínima demostración de cualidades buscamos la contra-parte, no podemos concebir lo bueno de alguien o su éxito, siempre sospechamos de mala manera, la frase común es «ah no, ese algo oscuro se maneja, es un pendejo», pero sin embargo fuera del País no sucede eso, nos ven nuestro lado bueno y nos acoplamos de mejor manera a equipos de

Luis Horna
Luis Horna

trabajo de esos Países, casos se cuentan por miles, en el punto de vista deportivo vemos nomas el caso de Pizarro, Guerreo, Farfan, Solano, etc., y en el Tennis a Yzaga, Olmedo, Horna, todos son uno, nunca hablamos de «tal equipo», sino de el en ese equipo, somos muy buenos para trabajar en equipo con alguien que no sea Peruano, sino veamos el caso de Luis Horna, excelente jugador de Tennis, que se hizo como tal en Argentina, gano el Roland Garros en Dobles haciendo pareja con un Uruguayo.

Pero sin embargo ni así hay apoyo masivo al Tennis, pues no es de masas, en lo que podemos ser buenos o mejores no lo valoramos, somos tercos en seguir con otra cosa que solo nos da sufrimientos y derrotas.

Somos segundones o empatadores en todo, nos conformamos con celebrar a glorias que solo llegaron a una final sin ganarla, o avanzado a un cuartos de final en un Mundial, siempre pensamos en menor y creemos que es bueno celebrar un empate a Argentina en la Bombonera.

Somos picones, insultones y cobardes, si vemos que no podemos ganarle al rival nos acobardamos y aceptamos que perderemos sin antes de jugar siquiera, o a veces superamos la confianza a niveles inexplicables y nos sentimos seguros de ganar pero a la hora de la hora no estamos preparados para afrontar el trajín y perdemos categóricamente.

La sociedad es muy candelera, es decir idoliza rápidamente al que no ha ganado nada aun, o lo minimiza a la mínima expresión de un error.

Somos fanáticos de la moda chatarra, es decir de la música pasajera o las costumbres extranjeras que se presenten, si vemos que un carro lo pintan de un nuevo color, todos quieren usar ese color, si llega un extranjero con el pelo parado o con barbita, inmediatamente un montón de gente se le pega eso de moda, no aceptamos como somos, queremos ser diferentes buscando parecernos a lo que no somos.

Nos tildamos de cholo, serrano, crolo, negro, zambo, etc., cuando eso somos en si, creyendo algunos que es un insulto ser lo que es, eso es racismo e hipocresía, si alguien no tiene la piel blanca lo catalogan de descendiente de los Incas y eso la mayoría cree que es impuro o que daría vergüenza.

Es común escuchar en conversaciones sentirse orgullosos algunos de que algún antepasado vino de otro País o que el apellido que llevan proviene de tal País, y lo que es peor es que hasta en Lima mismo se considera asquiento que un limeño venga de Padres provincianos.

«Hay una Feria Internacional de productos marinos, y en uno de los stands hay 2 cestos de cangrejos, y de forma curiosa se acerca un comprador que le pregunta al expositor: -Porque tienes un cesto abierto y el otro tapado?-, y el pescador responde: -ah bueno es simple, en uno llevo cangrejos peruanos y en otro cangrejos chilenos, el cesto cerrado es de los cangrejos chilenos pues se saldrían ayudándose entre ellos, en cambio el cesto de cangrejos peruanos no es necesario taparlo, pues mientras un cangrejo quiere salir otro lo jala desde abajo para evitar que salga-“

Esto define muy bien lo que somos, ya que al mínimo éxito de un Peruano en su propio País no lo podemos aceptar y queremos buscarle algún defecto, alguna trama o hasta inventamos historias para tachar a ese Peruano que trata de progresar. esto no solo se cumple en el plano empresarial, sino en el mismo ambiente de trabajo, en las familias, es más, hay algo peor aún, que si alguien está en problemas o pasa por aprietos económicos no lo comprendemos y lo tachamos de irresponsable inmediatamente, reprochándole y no apoyándolo ni moral ni amicalmente, desahuciamos al enfermo dejándolo morir, no hay piedad ni benevolencia por el convaleciente, solo queremos escuchar cuando muere o fracasa, eso se convertirá en noticia de todos los días y hasta catarsis y punto de noticia de los medios será, así somos.

Que somos entonces?, cambiemos estas malas actitudes para el futuro, espero este tema sea de reflexión para muchos de nosotros, me incluyo pues defectos tenemos todos, virtudes también, solo hay que saber reconocerlas y mejorar cada día como persona.

Para finalizar dire que existe la reivindicación, y al menos en eso somos buenos, aqui un ejemplo: